Voy a decir algo tras ver solamente dos episodios (más alguno más aleatorio estas últimas semanas): la lucha de Buffy contra unos demonios que pretendían ser utilizados por el gobierno mientras un cyborg alimentado por energía nuclear urdía un plan para cargarse todo, el bicho por supuesto malo malísimo. Me gusta la serie, y me ha gustado este episodio (doble). Pero he visto algo que me ha llamado la atención, el uso en esta serie de efectos especiales de última (o penúltima) generación cuando Buffy es poseída por un conjuro arcano para enfrentarse a todos esos malos malísimos. No voy a decir que queden mal, o que los argumentos estén al servicio de los efectos, pero... la serie ha perdido el encanto de la serie B. El punto cutre de la primera temporada (la única que seguí en su momento) se ha perdido y con él parte de esa gracia de lo añejo (casi se podría decir que rancio).

No creo que vea muchos mas episodios, la televisión es algo que cada día veo menos, y cuando lo hago es no planificado, la enciendo a ver que hay mientras hago alguna otra cosa. Eso implica que soy incapaz de seguir una serie que implique un horario concreto, y el video está abandonado desde que conocí el mundo del divx. Así que en mi recuerdo me quedo con aquella primera temporada, los monstruos de cartón piedra y la gracia de aquellos primeros personajes. Quizá si algún día veo las temporadas con alguna continuidad (por ejemplo pirateadas) igual le pillo el gustillo a esta Buffy universitaria, y mientras seguirá siendo algo que me encuentro en la tele y no que busco.