El caso es que mi regusto por los libros de literaturas fantásticas no tiene ya remedio, y eso deja poco sitio a otras literaturas mas tradicionales, reconozco una enorme falta en los clásicos, y lo que es peor, tengo pocas ganas de leerlos, y sin embargo de vez en cuando cae en mis manos un libro (no friki) de esos que hacen que uno sea incapaz de dejarlos, ya no sólo mientras lo estás leyendo, sino horas días y semanas después de que lo acabes.
Eso me pasó hace unos años con este libro, lo empecé a leer sobre las once de la noche, y lo leí muy lentamente, paladeándolo, disfrutándolo realmente a fondo, terminé de leerlo a eso de las seis de la mañana. Luego dormí, o algo parecido, porque yo seguía viviendo en el profundo sur, era amigo de Ruth e Idgie. Me encargaba de Muñón de vez en cuando y escuchaba cantar a los negros alrededor de una hoguera mientras esperaban que actuase Bill el del ferrocarril
Nunca me imaginé como pareja de ninguna de las dos chicas, ellas se pertenecían mutuamente, eran la pareja de lesbianas (en el libro lo deja más claro que en la película, aunque muchos me lo siguen discutiendo) más unida y encantadora que he visto o leído nunca. Yo no tenía interés alguno en meterme en medio, solo podía hacer como el viejo bagagundo Smokey Lonesome y adorarlas desde el silencio. Realmente soñé con su mundo esa noche, y alguna otra noche, y luego soñé despierto muchas más veces. Pocos libros me han emocionado como ese, pocas veces he reído y llorado como con ese libro. Pocas cosas he leído más divertidas que las travesuras de Idgie con el reverendo Scroggins y pocas mas tristes que la muerte de Buddy. No sabría decir porque lo adoro tanto, creo que es algo que supera mi capacidad de análisis, quizá sea la hermosa recreación de la vida en tiempos difíciles, la pobreza en tiempos de la gran depresión, quizá la descripción del racismo más duro como sólo podía serlo en la entreguerra en el estado de Alabama, lo más profundo del profundo Sur. Quizá sea la íntima descripción de una serie de personajes entrañables que desearías que fuesen tus vecinos y amigos, y lo digo desde el convencimiento de que en otra vida he sido un Threadgoode. Quizá el detalle de la verdadera piedad (en un tiempo en que esa palabra ha sido demasiado devaluada por las distintas religiones) que se ve en ese impresionante momento en que Sipsey aplica la eutanasia a Ruth. Hay momentos muy duros, momentos muy tiernos y momentos muy divertidos en esa novela, una gran novela.
Tengo dos copias de ese libro, una para mi y otra para dejar, necesito leerlo cada cierto tiempo. Aunque ahora he cometido el error de quedarme sin ninguna, así que me consuelo viendo la versión cinematográfica, que siendo sólo una adaptación es una magnífica adaptación, extraordinaria diría yo, sin duda una de las mejores. Es sólo una sustituta de la novela, pero una muy buena sustituta.
Para los amantes de estas cosas "Fried Green Tomatoes" de 1991, dirigida por Jon Avnet, con Kathy Bates, Mary-Louisse Parker, Jessica Tandy y una extraordinaria Mary Stuart Masterson que hace de Idgie.
La novela original es de Fannie Flagg y francamente, la recomiendo sin ninguna duda.