Antes de salir por la puerta recojo los periódicos que el repartidor, como de costumbre, nos ha dejado delante de la puerta (en una posicón aleatoria en un semicírculo delante de ésta)
La noticia de portada de El Mundo es fantástica: "El gobierno planea modificar los acuerdos y financiaciones con la Iglesia Católica"
No tengo tiempo de leerla, así que me voy a trabajar, un poco menos infeliz que de costumbre.
Me vuelvo, y mientras estoy comiendo, como no puedo leer el periódico, me pongo a navegar, y me encuentro con un desmentido del gobierno en EFE.
Y me quedo pensando... ¿Será que han vuelto a recular?
Me quedo en la duda entre las tres posibilidades que se me ocurren:
- El gobierno leyó lo de las manifestaciones anti-católicos y envió un aviso por vías no oficiales. Uséase 'cuidadito con lo que hacéis que como nos deis el coñazo os va a financiar vuestra Santa Madre (iglesia claro)
- Los obispos conocían el plan y ayer anunciaron movilizaciones, lo mismo que la anterior pero al revés, y el gobierno se ha acojonado.
- La información no era real y el gobierno no tenía interés en cambiar nada.
Cualquiera de las tres es una pésima noticia. La que me alegraba, el hecho de que realmente lo iban a hacer, no se ha producido. Una pena porque era de las cosas que este gobierno podía hacer para mantener el espíritu que lo llevó a ganar las elecciones, el hastío de la población tras muchos años de conservadurismo exacerbado.
¿Será verdad, como dicen tantos ya a estas alturas (ya superados los 100 días de gobierno) que éste es el gobierno de las rectificaciones inmediatas? Ya veremos, aún le doy algo más de margen.
De todos modos, hay una segunda reflexión interesante, los medios de ideología liberal han clamado contra esa presunta revisión de los acuerdos iglesia-estado. Si hay que reducir estado, como dicen los liberales, el dejar de financiar a la Iglesia me parece una medida elemental. Pero no les gusta. ¿Qué conclusión saco? Pues nada nuevo, sólo lo que he dicho insistentemente, el liberalismo y el ultra-conservadurismo son inseparables, no sólo a nivel de partidos (no sé de ningún país donde no vayan agrupados bajo las mismas siglas), si no a casi todos los niveles. Y la razón es obvia, quienes más sacan con el liberalismo económico son los conservadores por excelencia, los grandes ricos, son ellos quienes se pueden permitir pagar los servicios que el estado nos ofrece ahora (sanidad, educación, etc..) y a quienes más les interesa conservar lo que ahora han de pagar en forma de impuestos. O dicho de otro modo, el liberalismo es la ideología de los que tienen muchísimo dinero y quieren tener más. La gran ventaja es que disfrazando eso de ideología quedan mejor ante la opinión pública.
La simple lógica diría que liberales y conservadores jamás deberían ir juntos a ningún sitio, pero la realidad es muy obcecada y se empeña en demostrar lo contrario.