PARÍS.- Un grupo de cazadores de jabalíes mató, ayer lunes, a la última osa parda autóctona de los Pirineos, de nombre 'Canela'. Esta era la última hembra fértil de esta especie, en peligro de extinción, que vive en esta cordillera, a caballo entre España y Francia.
El ministerio de Medio Ambiente indicó que en el valle de Aspe ya no quedan osas, sólo dos ejemplares masculinos, y que la población de osos en los Pirineos asciende a “unos 15, de los cuales tres o cuatro hembras”, que han sido llevadas a la zona pero que no nacieron allí.
La gendarmería ha confirmado que Canela, que iba con uno de sus oseznos, se sintió en peligro, ante la presencia de los cazadores, y atacó al grupo, que no tuvo más remedio que disparar y abatirla. El suceso ocurrió en el valle de Aspe.
Las asociaciones ecologistas han calificado lo ocurrido como un “crimen” y un “acto contra la naturaleza”, pues se trataba de la última osa de su especie. Actualmente quedan unos seis osos de los Pirineos en la zona. Canela tenía 15 años. “Una batida con perros en un sector donde la osa estaba presente no tiene ninguna excusa”, opinan las asociaciones de protección de los animales.
No voy a pedir que esos hombres se dejasen atacar, pero ¿No podrían haber ido a cazar jabalíes a Rumanía? O mejor aún, ¿No podrían cazar jabalíes en un videojuego? O quizá leerse tebeos de Asterix...
Supongo que ahora saldrá la ex-secretaria general de medio ambiente diciendo que la culpa fue de Canela que corría mucho y... Ah, no, ése era el Lince:
(Número de expediente 713/000548).
[Ultima intervención]
El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra la señora Martorell.
La señora SECRETARIA GENERAL DE MEDIO AMBIENTE (Martorell Pallás):
Gracias.
Efectivamente, la supervivencia del lince es complicada, y yo creo que en eso estarán de acuerdo conmigo.
También puede ser un problema de espacio porque le estamos acotando el terreno. Por eso digo que espero que sea suficientemente inteligente para adaptarse a las nuevas circunstancias, porque en esta vida ocurren esas cosas. Yo creo que quizá los más pequeños, entre comillas, como los de la cría en cautividad, tienen una capacidad de adaptación mayor que los que han vivido hace pocos años en un gran espacio, porque sabemos que el avance económico y de desarrollo y tecnológico se ha dado durante estos últimos años y nos ha cambiado nuestro paisaje tremendamente.
El hombre, por suerte, es más inteligente y es capaz de adaptarse a ello. El lince parece bastante menos inteligente de lo que creíamos que era. Quizá tenga muy buena vista, pero después en sus conductas es un animal que corre muchísimo, y al correr muchísimo hay veces que no ve, no se para a ver adonde tiene que ir y por eso en vez de ir por debajo va por arriba. Yo no he comprobado que haya pasos por debajo, pero a mí se me ha dicho y me lo creo porque todos estamos sensibilizados y la comunidad autónoma también. Creo que tiene que haber un factor de adaptación al medio, como lo han tenido otros, para poder sobrevivir, a no ser que haya otras causas que estamos intentando mitigar.
Hay otros animales, como el quebrantahuesos —siempre me gusta ponerlo como ejemplo— de los que hace unos años teníamos poquísimos, mientras que en este momento no recuerdo si son 300 ó 600 las parejas existentes en los Pirineos. Incluso el otro día crió uno en cautividad en Jaén. Esperemos que vaya bien. Es una experiencia que hay que realizar. Incluso los de los Pirineos están pasando a los Picos de Europa. Ojalá podamos decir en breve, porque no hay muchos, que nuestros linces se están adaptando a las circunstancias, por supuesto ayudándoles en todo lo que sea necesario, porque el Ministerio está totalmente abierto, y que podamos encontrarlos en Extremadura, porque ya los hay en el sur de Portugal, incluso si es posible un poco más arriba, aunque el medio parece menos adecuado.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señora Martorell. Señorías, acabamos este período deseándoles a todos ustedes un feliz verano y, desde luego, que gocen de la naturaleza. Muchas gracias, se levanta la sesión.
Eran las dieciocho horas y veinte minutos
Lo dicho, será que Canela no supo adaptarse, o algo así. O será que las autoridades medioambientales son especialistas en "El club de la comedia" o en monólogos de Faemino y Cansado, en vez de en tomar las medidas necesarias para evitar que sucedan cosas como esa...