En la misma esquina, con 3.8 kilos menos, su maravillosa y satisfecha madre (sale en la misma foto).
Y en la esquina opuesta, mirándolas a ambas con cara de embobao (esto ya es imaginación), su feliz padre que es el que ha hecho la foto.
Felicidades a los tres.
(Más información próximamente, permanezcan atentos a sus pantallas)