La ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, ha pedido al cardenal Antonio Cañizares que retire sus declaraciones de esta mañana en las que ha comparado el aborto con la violación. En una entrevista en TV3, el cardenal prefecto de la Congregación por el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos ha asegurado que los abusos a menores en colegios e instituciones católicas irlandesas denunciados recientemente son "conductas totalmente condenables y tenemos que pedir perdón". No obstante, ha añadido que "no es comparable lo que haya podido pasar en unos cuantos colegios" con "los millones de vidas destruidas por el aborto".
Ya no tengo más calificativos, lo siento. Se me acaba el vocabulario para mostrar mi desprecio por esa chusma. Solo recordar otro post de esta mañana, donde me hacía eco de una editorial de al revista del arzobispado de Madrid donde se defendía que si se dispensan anticonceptivos sin receta, se debería legalizar la violación.
Traigo de nuevo el chiste gráfico que puse en otra historia donde comentaba las violaciones sistemáticas en Irlanda:

Me da asco que intenten desviar la atención de la violación endémica que sucede en los colegios de curas diciendo que es algo menor comparado con el aborto o con el uso de anticonceptivos. En fin, ya más bajo no pueden caer. En estas últimas semanas me quedo con el viejo dicho: "la única iglesia que ilumina es la que arde".