Debo reconocer que no he seguido el asunto de Borjamari, leí un par de comentarios suyos sobre bitácoras que conocía y me parecieron, una desacertada y otra simplemente insultante, y decidí que no tendría ni comentarios ni visitas mías. Simplemente me pareció un blog a lo crónicas marcianas o algo similar, un blog que cree que para trinunfar ha de crear polémica y/o irse al insulto. Sin embargo es difícil leer blogs por ahí y chatear sobre blogs, y no ir enterándose de unas cuantas cosas más y en cierto modo se puede decir que conozco ya un poco mas el blog de borjamari.

La única forma de combatir a estos blogs (y programas) que viven para el insulto y la polémica es la indiferencia, y en eso estoy, porque esa es la conclusión que he sacado de esa bitácora.

Sin embargo me parece muy legítimo que la gente que se siente criticada le conteste, y me parece muy legítimo que lo haga en los mismos términos. Si borjamari se permite decir, por ejemplo, que rvr se ha endiosado, algo que directamente es un insulto y que para afirmarlo tendría que conocer a la persona, ¿porque no admitir que se le llame a él gilipollas? Tan legítimo me parece lo uno como lo otro la verdad, sin embargo, a juicio de algunos lo primero es aceptable pues entra dentro de la crítica pero lo segundo no, por lo visto los críticos ofensivos han de tener bula para no recibir el mismo trato.

Lo que me inquieta de todo esto es ver la cantidad de seguidores que tienen los programas y blogs basura, la cantidad de gente que salta dispuestos a defenderlos y a acusar a sus críticos de pretender coartar la libertad de expresión. Claro que es libertad de expresión que existan estos blogs, como lo es que se les critique con la misma acidez e impunidad con que actúan ellos. Ciertamente a mi me parecen de mal gusto y no los leo, pero supongo que tengo que aceptar que existan. Pero el argumento es el mismo para sus críticos ¿Como podemos exigir que no se les critique? ¿No es esa exigencia un ataque profundo a la misma libertad de expresión que se dice defender? Ciertamente no entiendo el razonamiento, se me escapa completamente. Sin embargo ese argumento lo he leído en mas de un sitio y, si no entendí mal, un ex-blogalita que abandonó la casa por las críticas a borjamari lo defendía, y digo que si no entendí mal porque no puedo ir a mirar lo que en su momento defendió porque todo ha sido borrado.

En cuanto a que determinados autores son grandes escritores y eso es lo que molesta, artistas del género crítico, gente de agudo sentido para la crítica afilada y mordaz y bla bla bla... bueno, eso ya es cuestión de gustos, pero a mi siempre me ha parecido que las mofas estilo club de la comedia son mucho mas sencillas de hacer que los análisis reales, que la parodia es el género chico del humor y que solo pasa el filtro de lectores dispuestos a la risa fácil. Los monólogos del club de la comedia están bien mientras son abstractos, te ríes un poco y pasas el rato y te olvidas de todo a la media hora, pero cuando esa misma mofa se personaliza en alguien entra dentro de lo que yo considero mal gusto e insulto gratuito. No se busca la crítica, se esta buscando al lector mediocre, del mismo modo que Crónicas no busca hacer buena televisión sino la audiencia de la gran masa de telespectadores, esos dispuestos a la risa fácil y acrítica. Los Borjamari de este mundo buscan a esa misma gente, o su equivalente lector-bitacoril. Hacer una crítica seria, con humor, incluso con mordacidad, y al tiempo respetar a las personas es mucho mas difícil, muchísimo mas difícil, y eso si me parece digno de elogio, pero, como digo, eso está lejísimos de los borjamari de este mundo, y ciertamente, muy lejos de mis aspiraciones personales también, prefiero no aventurarme en terrenos que no domino y seguir leyendo a Castelao.

Supongo que para entendernos, es la misma diferencia que veo entre las "Agárralo como puedas" y "La vida de Brian", ambas son parodias, pero una un poco mas inteligentes que la otra, aunque ciertamente eso es una apreciación personal.

Y hablo de Crónicas, pero aviso que no he visto mas de un par de programas en toda su historia y media docena de fragmentos de otros (ningun programa más entero). Y defenderé que exista (frente a esa intención gubernamental de eliminar programas basura), pero exijo mi derecho a decir lo que me parece del programa. Y digo lo que me parece del programa, no de su creador. Diré que me parece de mal gusto y de contenidos pobres y que no pasan un mínimo filtro de coherencia (y aquí estoy pensando en uno de los programas que vi donde juzgaban y condenaban a gentes declaradas luego inocentes por los jueces en un turbio asunto de un club Gay sevillano), pero mi crítica nunca será del tipo "rvr hacía una buena bitácora pero se ha endiosado", es mas, éste tipo de críticas me merecen el calificativo de 'gilipolleces' y lo digo sin rubor.