Akin, no se justifique usted que es innecesario.
Además, por mucho que intente disimularlo, usted siempre será un censor, en paro sí, pero censor al fin y al cabo (conocí a un carabinero que una vez jubilado seguía bajando, todos los días, al puerto a ver si distinguía a alguno de los contrabandistas de antaño haciendo alguna de sus fechorías).

Por cierto, ¿contestará usted a mis comentarios sobre la muerte del seguidor del Coruña? ¿Se lo posteo de nuevo para que pueda hacerlo? ¿Puedo, a partid de ahora, alegrarme sinceramente de la alegría de Virginia? ¿En serio piensa usted que ni a mí ni a los que leen sus desbaradas les importa una mierda toda esta historia de censura de comentarios? ;))

Venga hombre, siga usted escribiendo que lo hace bien (aunque de vez en cuando se le vaya la olla) y déjese de buscar bronca que no le veo modos ni maneras propias para ello.

Mmm, lo más irritante es que el Tubbo se crea el rey del cotarro sólo por haber nacido en los años de la picor :D

¡Oh, amigo gordito italiano! ¡Y como picaba el mardito!
Si quiere usted, puedo contarle alguna historia de aquella época en la que nos censuraban por todo y, a pesar de ello, siempre sabíamos como saltarnos la censura para opinar libremente (aunque, a veces, hubiese que pagar por ello con unos vergazos en los riñones o con algo peor).

Por si te sirve de algo mi opinión: borra lo que te salga de la cresta y cuando te salga de la cresta. Que el borrar las deposiciones sea algo espontáneo, no una rutina planificada e improrrogable. Sin darle demasiada importancia; sin urgencias, y por supuesto sin obsesiones ;o)

Pues Tubbo, sería fascinante. Espero esas historias con placer, serían diferentes a su línea editorial habitual :)

¡Qué malas son las obsesiones amigo Memelofreak!
No obstante, ¿se ha parado usted a pensar que, a veces, hay tipos que necesitan de sus obsesiones para sentirse vivos? ¿Como sabe que esa rutina obsesiva de controlar su blog por ver si tenía algo que borrar-censurar en el mismo no servía para mantener a Akin con la atención despierta y las neuronas activas?

Si le soy sincero, el saber que ha depuesto su actitud combativa hacia mi persona me ha sumido en una especie de desánimo y honda preocupación por su estado.
Sinceramente, no sé si atribuirla a un bajón anímico, por su parte, o a una genuina labor de sana instrospección.
El tiempo nos lo dirá.

Tubbo:
"Además, por mucho que intente disimularlo, usted siempre será un censor"

Bien, difícilmente podría haber encontrado una forma mas profunda de insulto señor Tubbo, gracias.

Y que a partir de ahora pueda escribir aquí sin que yo le borre nada no significa que yo tenga razón alguna para contestarle, de hecho el cambio de política no es por que perciba su persona de ningún otro modo que hace unos días. Sigo deseando no volver a leerle nunca más por pura higiene mental, pero es un deseo que ya he pasado de la lista de posibles a la de utópicos. No la paso a la de quiméricos porque aún tengo una salida y es no volver a leer nada de la blogosfera.

A partir de ahora, eso si, usted será libre de poner lo que le de la gana, como yo lo seré de contestarle, o de no hacerlo.

No es insulto, señor Akin, es sencillamente una constatación de sus continuos intentos por censurar mis comentarios.
No creo que de la noche a la mañana vaya usted a perder esa mentalidad que le ha llevado a borrar sistemáticamente todos y cada unode mis comentarios, al margen de su contenido. Otra cosa es que, a partir de ahora, usted haya tomado la decisión (al parecer presionado por opiniones ajenas) de dejar de ejercer de censor pero eso no quiere decir que en su fuero interno no se revuelva usted en deseos de darle al delete cada vez que lea un texto mío.

Por mi parte, tiene usted mi firme promesa de que solamente comentaré aquellos textos en los que coincida que paso por aquí y disienta de lo expuesto (para decir que estoy de acuerdo con lo escrito considero que hay otros muchos que saben hacerlomejor que yo -me refiero a lo de pasar la mano por la chepa).

Finalmente, yo nunca le he exigido que conteste usted a mis comentarios ni, dicho sea de paso, le he negado la libertad de hacerlo ni aquí ni, incluso, en mis bitácoras (de hecho le cursé una invitación a hacerlo, siempre que lo estimase oportuno -invitación que, probablemente, usted también haya borrado).

Por cierto, gracias por su consideración de persona hacia mi modesta entelequiedad.

Que nadie que te busque las cosquillas consiga que dejes este blog ni ningún otro... De hecho me entristece pensar que esa sea la causa en otros estupendos blogs.
Lo dicho y a otra cosa mariposa ;)