Así que sintiéndolo mucho he empezado a bajar revoluciones. Quedan en el blogroll sólo gente que conozco personalmente o que conozco de charlar casi a diario con ellos a través del teclado. Más algunos, muy concretos, a los que trataré de ir siguiendo la pista.
No quiere decir que vaya a leer todos los que que quedan ni que deje de leer los que he borrado (por ejemplo a los blogalitas los seguiré de todos modos a través de la portada de Blogalia y a muchos otros los tengo en el firefox en mi menú de blogs, simplemente los seguiré de modo más informal en vez de leerme todo lo que escriben) De hecho el blogroll es más un compromiso social que una lista real de lo que leo y lo que no, pero entrar en bloglines (el blogroll lo genero de Blogalines) y ver 1500 post pendientes es algo que procuaré que no se dé de nuevo.
Las causas son diversas, por un lado Red Progresista me ocupa mucho del tiempo que antes dedicaba a otros blogs, por otro lado ahora tengo mucho menos tiempo, y por otro tras una época de lectura de blogs compulsiva estoy bastante saturado.
Prefiero echar el freno. Espero que nadie se moleste.